Un mal día dejé de conjugar
el futuro perfecto. Se esfumó
de aquel libro gastado de gramática
que solía leer asiduamente.
el futuro perfecto. Se esfumó
de aquel libro gastado de gramática
que solía leer asiduamente.
Y me topé de frente con la fobia
que me causaba el modo imperativo.
Con el condicional me consolé,
intentando pensar: ¿ Y si tan solo
fuera una pesadilla?¿Si eso nunca
pasó? Me ilusioné con el acaso
que el subjuntivo, amable, me ofrecía
con rasgos irreales. No me queda
salida; aceptaré que mi vivir
es tan solo un gerundio: subsistiendo.