PUÑALADA VERBAL (SONETO ISABELINO)


Te atravesé, brutal, con mi cuchillo
forjado en tus falacias y vilezas
bruñido con afrentas y bajezas
y no dudé al hacerlo, fue sencillo.

Afilé sin pudor mi lengua aguda,
preparé mi discurso con esmero,
sin piedad, mi alegato fue sincero
en tu cara escupí la verdad cruda.

Mudo por la sorpresa sucumbiste
batido fuiste por el arma incruenta
maté tu orgullo de forma violenta,
vulnerable al ataque, feneciste.

Me vacié de mis odios y rencores
e ingrávida, olvidé viejos temores.