MARASMO (JB)




Cae la tarde plomiza y cansada,
como un manto de lana trenzada.

Me siento lasa y algo distraída,
acomodada, semi adormecida,
como el que sueña que vive y olvida
que no es un cuento bonito la vida.

Quiero escapar, el marasmo me abraza,
la inercia gris planea y me amenaza.

Este vacío me mantiene hastiada
ya que quisiera sentirme encendida
pero hoy la muerte a la vida se enlaza.

FRÍA Y GRIS ERA LA TARDE...


Fría y gris era la tarde
con otoñales reflejos…
Ella, mirando a lo lejos,
siente el corazón cobarde.

Vaga sin rumbo y olvida…
la pena rompe su alma,
es un marasmo la calma.
La mente tiene dormida.

¡No le habléis, dejadla absorta!
Aunque sea duro y amargo,
necesita este letargo,
la verdad ya no soporta.

Permitid que sobrevuele
por pretéritos lugares,
ha de enjugar sus pesares
hasta que así se consuele.

¡No queráis darle consejos!
¿No veis su frente que arde?
No nota el frío esta tarde.
No está aquí, que está muy lejos…

SEGUIDILLAS CON BORDÓN


  No me dejes, amor,
me apagaría,
porque sin ti la vida
nada valdría.

Tan sola y triste,
sin ver jamás tu risa
puedo morirme.